domingo, 15 de agosto de 2010

esas cosas raras de las relaciones

esto, lo escribió juli en su blog www.mexicomemata.blogspot.com, lo dice tan claro, a veces esto mismo, menos claro, les digo a mis amigas, cuando sufren porque alguien no les da bola. lo comparto. especialmente para pau. "Así como todos vimos He´s not that into you y entendimos (a pesar de lo mala que es y el desperdicio enorme de un gran tema espantosamente realizado) que los tipos cuando no nos dan bola es simplemente porque no les gustamos tanto (o lo suficiente). Y a pesar de este saber universal, las mujeres gastamos horas, días, meses y años elucubrando, intentando entender, haciendo una exégesis exhaustiva de todos los movimientos, palabras, hechos ocurridos y demás etcéteras. La especulación, como es de suponer, no nos lleva a nada pero nos calma, nos sostiene. Y nos entrentetiene eternamente, aceptémoslo. La contracara son las interpretaciones de ellos en cuanto a nuestros sentimientos. Está claro, clarísimo que los hombres no entienden nada por más películas que puedan llegar a ver, por más amigas con las que hablen. Chicos: las mujeres nos enamoramos de los hombres equivocados la mayoría del tiempo. Caemos en las garras del casado, del fóbico, del amigo, del gay, del complicado, del que no quiere tener más hijos, del que simplemente no nos quiere tanto. Sin parar. Y sí sufrimos, y queremos más y lloramos y nos duele la panza pero la piloteamos porque alguien nos enseñó de chicas que: ante todo, dignidad. Y los pibes suelen no (querer) darse cuenta de nada. Piensan que somos livianas, que nos copa coger así, de onda, sin esperar más o que la llevamos super bien aunque ellos pretendan mantener el statu quo por siempre. Qué manera de no entender nada. De nada. Es mentira, chicos. La pasamos mal y nos cuesta recuperarnos aunque jamás se vayan a enterar. En lo personal, si me volviera a pasar, nunca repetiría errores pasados. Jamás me quedaría callada, suponiendo que el otro entiende, sabe. De hecho me pregunto por qué lo hice de chica, por qué alguien no me dijo que no perdía nada, que podía enfrentarme al pibe y tirarle la posta y que, en definitiva, nada va a cambiar porque a alguien le gustás o no le gustás y punto. Acá va a estar lleno de mujeres que creen en la especulación, en crear tácticas, en mostrar pero no tanto, en decir pero no todo. Bueno, son posturas. Yo creo postivamente: si me querés, quereme enamorada. En otro orden de cosas, a mí la gente en general me enamora más por su miseria que por sus supuestas cualidades positivas (me enamora, me encanta, me atrapa no en el sentido romántico, claro). La aceptación de la miseria y su desarrollo me apasionan. La mentira, la impostación, la condescendencia, la formalidad, por el contrario, me alejan, espantan, confunden. Sé que peco de conejito cándido pero ¿por qué alguien te dice que va a hacer algo que finalmente no hace? ¿qué sentido tiene? El mundo se mueve así y es obvio que soy la inadaptada. Ni modo. Igual sigo creyendo y esperando a que la promesa se haga realidad hasta que el tiempo ya no deja dudas".

3 comentarios:

Paula dijo...

es tan claro, lo tenemos tan claro, y volvemos a caer...ojalá algún día deje de sentirme identificada con esto! y gracias Ile por escucharme (leerme) en todas esas circunstancias, te quiero

Anónimo dijo...

Gracias...finalmente yo también soy Paula.

Paula

Anónimo dijo...

Paula, lo decís con mucha claridad, y al leerlo no me sentí tan loca ni defasada...mal de muchos?